La montaña rusa.

Cuando el vagón de la montaña rusa cae en picado, tus órganos internos tardan un instante en adaptarse a la nueva situación, por lo que se experimenta la extraña sensación de que se te van a salir por la boca.
Trayectoria curva.
Los vagones de la montaña rusa se ponen al revés pero los pasajeros no salen despedidos. Vamos que no corren peligro, no os preocupeis los que hayais visto destino final...No sé si es la tres...Bueno alguna.
La curva de la pista está diseñada hasta el más mínimo detalle para que los pasajeros permanezcan en los asientos cuando la posición de los vagones se invierte. Cuando un vehículo se desplaza en una trayectoria curva, los ocupantes tienen la sensación de que son arrastrados hacia el exterior de la curva.
Si quieres comprobar este fenómeno, coge un cubo y pon una pequeña cantidad de agua en el fondo. Si giras el cubo como la montaña rusa cuando riza el rizo verás que el agua intenta alejarse de ti, pero si desplazas el cubo en círculo el agua se adhiere a la base. Curioso, ¿no?